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Casa Yal’ma Ka’an

Si quisieras estar completamente solo, con mucho gusto se ofrece servicio en la privacidad de tu balcón, en cualquiera de las camas de playa o a la orilla de la alberca. A tan sólo unos pasos de Acapulco pero parecería que estuviera a miles de kilómetros de este activo destino, la aislada Casa Yal´ma Ka´an tiene la ubicación perfecta para una experiencia romántica.

Este terreno fue originalmente comprado por una familia para sus vacaciones, evolucionando a lo que ahora es un exótico escondite, ideal para el viajero exigente. Las cabañas con techo de palapa son rústicas pero cómodas y creativamente con detalles de bambú, piedras decorativas incrustadas en los pisos y un acogedor balcón. Todas las cabañas están a unos cuantos pasos del mar y están estratégicamente ubicadas en la propiedad para maximizar la privacidad y comodidad.

El restaurante ofrece desde tradicionales pizzas horneadas a la piedra hasta exquisitos platillos de mariscos frescos. Para pasar una velada romántica se puede organizar una cena gourmet a la luz de las velas en la orilla del mar, amenizada con música viva y fuegos pirotécnicos. A su regreso a la cabaña encontrarán otro montaje romántico para terminar la noche. El restaurante del hotel es una palapa abierta y perfectamente ubi cada en el centro de la propiedad. Es un lugar relajado para disfrutar de la buena comida, tomar un coctel o simplemente para descansar o navegar por internet si es que traes contigo una laptop.

Casa de Mita

Sus escenarios de montaña y ríos, se convierten en el sitio ideal para practicar el montañismo y la observación de aves. Todos quedan maravillados al participar en la liberación de tortugas que se lleva a cabo en la playa de la villa. Después de cruzar la puerta de madera labrada, sólo vivirás experiencias inolvidables. Dos galgos italianos miniatura, te darán la bienvenida y seguirán todas las actividades de los huéspedes de esta villa. Los balcones privados de cada una de las habitaciones tienen una hermosa vista al océano y a la piscina con sus asoleaderos acuáticos y su pequeña fuente. Su propio balcón es el sitio ideal para tomar un café matinal, mientras observas el paso de las ballenas y los delfines. Los patios y salas son el sitio ideal para pasar una tarde tranquila leyendo o tomando un refrescante coctel al atardecer.

La villa está detallada al típico estilo Vallartense, con muros de estuco blanco, pisos de mosaico y puertas de madera tallada de Michoacán dando el toque de rústica elegancia. Aquí, la cocina es una pasión, y se demuestra en su excelente menú, éste es uno de los lugares en donde los huéspedes se alegran de contar con todos los alimentos incluidos. Es muy agradable escuchar el menú directamente del anfitrión o quizás del mismo chef, cada alimento es una sorpresa diaria.

El menú cambia diariamente, alternando entre especialidades mexicanas, contemporáneas y platillos internacionales, elaborados principalmente con vegetales de la localidad, pescado fresco, pollo y finos cortes de res. Los huéspedes tienen todos los alimentos incluidos.