“Agua que cae en el lugar de huida”: Cholula, ciudad sagrada del sabroso pecado
“Agua que cae en el lugar de huida”, del náhuatl: San Pedro Cholula, Puebla, ciudad sagrada, la Roma del Anáhuac, así conocida por sus 365 templos, iglesias, torres, según se cuenta en crónicas, un templo por día; con su celebérrima Plaza de la Concordia (creada en 1573 para el día de tianguis) franqueada por el amarillísimo color del ex Convento de San Gabriel, y el portal Guerrero, con sus 46 arcos de medio punto y 170 metros de profundidad deliciosa –la arcada más grande de Latinoamérica– donde en más de 100 mesas se disfruta de la sensualidad de la cocina conventual, la más pecaminosa de Mesoamérica donde el Chile en Nogada y el Mole Poblano despiertan a mil demonios y 12 arcángeles, en sabroso pecado.
Agua que cae a chorros y que inunda en el lugar de la huida, y limpia la ciudad. A la tarde noche llegando a Cholula un torrencial aguacero amainaba el entusiasmo de ver la imagen que ha hecho de Cholula un símbolo, y que todavía sugiere un enigma de cómo fue tomada: el Popocatépetl iluminando el fondo de la pirámide Tlachihualtepetl, con sus dos túneles que ocurren debajo, sobre la que emerge el magnánimo Santuario de los Remedios. Así, en medio de ríos que son las calles, arribamos al Hotel Boutique la Quinta Luna, que nos recibe con su puntual eslogan: ¡Descansa, ya llegaste!
La quinta esencia de La Quinta Luna
Una casona del siglo XVII intervenida de manera sublime, catalogado como monumento histórico por el INAH, que albergó al noble indígena cacique cholulteco don Juan de León y Mendoza, descendiente de Tecpan, de Tenanquiáhuac; los catedráticos Cárdenas González de Cossío transforman la casa en suya en 1995 y, en 2003 en el mejor Hotel Boutique de Cholula, dejando como joya máxima su biblioteca abierta a los huéspedes, con vigas del siglo XVII –donde se escribe esta crónica– y pinturas de gran formato de autores poblanos contemporáneos en la ex capilla y hoy restaurante.
La cocina sensual conventual
En la antigua capilla, un sonido bien repartido y los fines de semana ensambles profesionales de música, descansa el restaurante que mantiene una carta sencilla (que va cambiando) con ingredientes locales, frescos y un toque de elegancia, como los cuadros que decoran el antiguo oratorio en un ambiente de excepción y con el patio central iluminado por las noches, y por las mañanas soleadas se sirve el desayuno: los chilaquiles prietos, exquisitos huevos, cazuela con jocoque y omelette de espinacas, carpaccio de atún, un filete al cogñac, postres locales con frutos, nieves, y una selecta carta de vinos y licores.
La receta conventual del barroco poblano, dice: «Tome el recetario español, incorpore ingredientes locales, aplique técnicas indígenas y termine con una pizca de inspiración francesa. Añada la paciencia de mil vigilias moliendo especias y cueza durante siglos a fuego lento. Sirva acompañado de una leyenda de amor, devoción o gratitud.»
En estos días habrá que recordar el platillo de Agustín de Iturbide, creado por las monjas del Ex Convento de Santa Mónica Señor de las Maravillas, tal cual, el maravilloso milagro (como el accidente que dio luz al mole con chocolate del metate donde se domesticaban los chiles) del chile en Nogada, en singular: lo verde del chile relleno de carnes, almendras y pasas; el blanco, de la salsa de nuez retozando en cremosa abundancia, y la sagrada y sangrada granada del rojo de la bandera nacional. Maridado con un vino rojo mexicano: Shiraz, Nebbiolo, Cabernet Franc, o tal vez, asombrarse con un blanco, rosado o espumoso.
Ambiente hipermodernista
Cada habitación de La Quinta Luna esta finamente restaurada con un toque ambientalista hipermodernista, donde el confort y el descanso están garantizados, con un jacuzzi y kit de aromatizantes, una salita de descanso frente a una chimenea que no quema madera, por respeto a la naturaleza y a la norma, sino unas veladoras que arrojan su olor y lumbre al visitante, y donde el televisor se puede ignorar, pero ahí está en las habitaciones con los sugerentes siete nombres Caracol, Águila Real, Colibrí, Pavorreal, Jaguar, Coyote, Conejo. Para un plan de negocios, de amor, familia y de estudio. Además de su Colpalli SPA, con técnicas tradicionales, ozonoterapia (oxigenación del cuerpo) y masajes purificadores.
El dato
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Hotel La Quinta Luna 3 Sur 702 San Pedro Cholula Puebla, México 72760 T (222) 247 8915 T (222) 247 8916 F (222) 247 89
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